¿Votar? o ¿no votar? (Entre naranjas y limones)

Nuevamente el fantasma de las elecciones se coloca sobre Venezuela, y es que en los últimos años no hemos salido de una elección. Qué si la Constituyente, que si el referendum, que si las elecciones y ahora la reforma; no hemos podido disfrutar de unas navidades tranquilas, o por lo menos yo no he podido comerme una hallaca tranquilo, sin el pesar y la preocupación de preguntarme ¿qué es lo que va pasar? ¿habrán echos violentos? y la que nunca falta en los hogares del venezolano, tanto que ya la tenemos como slogan de sociedad, ¿será que voto? Pues señores y señoras por mi parte yo si voy a votar, es así que no me importara que me caiga mal el pan de jamón por la angustía, que me tenga que comer mis uvas por la arrechera de los resultados (esperemos que eso no pase este año) y que tenga que maldecir a Santa Claus porque no me trajo el regalo que en realidad quería y que quiero ahora más que nunca: Libertad plena para Venezuela.

¡Coño! ¿Será que el progreso nos cuesta demasiado? ¿Es que ahora todos somos apaticos y nos dejamos meter las cosas a la maldita sea? ¡Pues no! ¡No y no! no me lo creo, y nunca lo creere; desde que los estudiantes salimos a las calle para decir que no ibamos a permitir que nos robaran el país, desde que en las Universidades se han organizado y ahora los Centros de Estudiantes son lo que deberían ser, centros de asistencia al estudiante, donde se reciben propuestas, se plantean dudas y surgen soluciones efectivas para aplicar dentro del lugar donde nos educamos y para nuestro país. Debemos aprender que la manera en que manejamos nuestras Universidades se refleja en la sociedad venezolana, ¿por que? bueno muy fácil, y es que nosotros como estudiantes tenemos la enorme tarea de definir el futuro de Venezuela, así que es bueno estudiar y lograr metas progresistas dentro de nuestras aulas. Para eso es que los Centros de Estudiantes y las Federaciones Estudiantiles son tan importantes.

Siendo estudiante de la Universidad Santa María me siento muy orgulloso del lugar donde estudio, sin necesidad de sentirme mediocre o apático de lo que pasa en el mundo, la USM es un gran lugar de donde salen excelentes estudiantes. ¡Claro! yo también conozco la historia y se que esa casa de estudios nunca ha sido muy bien vista, es así que para todos aquellos que son tan mente cerradas y creen que allí dentro no nace nada bueno les digo: ¡Investiguen primero y después critiquen! ¡Y es que por actitudes como esas es que Venezuela está como está!. Ahora bien, en estos momentos me siento más que nunca orgulloso de la USM y de sus estudiantes, ¡Al fin! luces de organización surguen dentro de las escuelas para formar nuestros centros de estudiantes. Y es que la Escuela de Economía, la de Derecho, Comunicación Social y Estudios Internacionales han formado sendos grupos de trabajo para lograr que todos los Usemistas se sientan representados.

Es por eso que lanzo mi más grande apoyo a los Naranja, a los Verdes, a los Rojos y a todos los demás que sienten esa necesidad de expresarse y de plantear ideas nuevas y frescas para la Universidad. Hemos aprendido a no quedarnos callados ante lo que pasa en Venezuela y saber reconocer que nuestra Universidad debe mejorar, y que debemos poner nuestras energías y nuestras ganas para sacar una Santa María digna y que valga lo que nosotros merecemos. Es por eso que digo ¡Adelante! ¡Sigamos así! porque en la USM calidad es lo que hay y en grandes cantidades. El reto a la excelencia ya no existe, excelentes ya somos, ahora el reto es a MEJORAR.

Jefferson.