miércoles, marzo 07, 2007


Memo a los Enamorados.

Es muy difícil determinar lo que realmente nos gusta, a veces creemos que algo es de nuestro agrado y a la final terminamos aborreciéndolo; pareciera que ya es algo grabado en el cerebro del ser humano ser muchas veces inconformes con lo que tenemos, ya tenía razón el ocioso que creo el dicho: “Dios le da pan precisamente al que no tiene dientes”. Muy pocas veces nos damos cuenta la suerte que tenemos, no importa si llega un punto de nuestra existencia en que nos sintamos miserables y que el perro callejero sienta lástima por nosotros, tenemos que prestar atención a los pequeños detalles que nos ofrece la vida. Y es que de pequeños detalles está compuesta la felicidad, una sensación que es muy buscada por todos nosotros.

Tomemos como ejemplo el Amor, está palabrita compuesta por 4 letras que tanto nos fastidia la vida, estamos dispuesto a pasar por las más arduas pruebas a cambio de que este sentimiento inunde nuestros corazones, que por cierto hay que saber que el amor está controlado por el cerebro y no por ese órgano bombeador de sangre que tan dulcemente vemos representado en tarjetas romanticonas y llenas de cursilerías, así que cuando vean la frase: “Te amo de todo corazón” eso es algo creado por los vendedores de flores y chocolates que se hacen su quincena el día de los enamorados. Pero bueno eso es otro tema, el punto es que nuestros instintos de supervivencia y las ganas de no querer pasar el resto de nuestra vida solos, nos hacen convertirnos en otra persona cuando estamos enamorados. Cambiamos totalmente, somos irreconocibles ante familiares, amigos, compañeros de trabajo, quién quiera que sea, hasta él que nos vende el periódico desde hace 10 años no sabe quién carrizo somos; y es que el amor ciega y embrutece pero como nos hace felices. Es allí que todas esas cosas que hemos leído alguna vez en un poemario por casualidad o por aburrimiento se nos vuelven reales y palpables, haciendo que la felicidad se torne infinita, en algo increíble que queremos que nunca acabe.

La tecnología nos ha dado nuevos instrumentos para comunicarnos, así aunque estemos en la China montados en la Gran Muralla comiéndonos una sopa Wanton podemos llamar a nuestra vieja y decirle que no nos dieron cucharilla para nuestro plato, así de grandioso se ha convertido el ingenio humano, pero pareciera que todavía no hemos aprendido a controlar nuestras emociones en torno al enamorarnos y a mantener una relación medianamente estable con otro ser humano. Una vez escuche que sin poesía no podía haber amor, sinceramente espero que esto sea cierto, porque sin caer en cursilerías ni melosidades que lo único que hacen es llamar a las hormigas para que nos muerdan y nos despierten de una realidad inventada, el romance nunca es malo, claro está que debemos saber como usarlo, permítanme darles un ejemplo: piensen en Frank Sinatra; yo sé que todos no tenemos su genial voz, ni el carisma innato que tanto lo representó, sin embargo lo que sí quiero que observen es esa mezcla de cualidades trabajadas y mejoradas en las cuales él se esforzó para que las mujeres se sintieran muy bien, y dentro de esto me refiero al respeto y a considerarlas unas verdaderas reinas. Y es que así debe ser porque si nos ponemos a estudiar un poco la situación hoy en día el mundo está manejado por mujeres, no quiero sonar feminista en realidad ese termino me saca de quicio, pero si quiero señalarles algunas verdades, debemos dejar de ser una cuerda de manganzones que a veces nos convertimos en seres descerebrados y no notamos lo que pasa en frente de nosotros. Tenemos a una pareja que desesperadamente nos pide afecto, y lo único que damos es esa patética excusa de cariño representado por besitos en las mañanas, mensajitos de texto de vez en cuando y un “Te Quiero” esporádico, no señor lo que yo digo es dejarlo todo en la cancha y convertirnos en la representación actual de un Romeo pero eso sí tecnificado y mucho más desintoxicado de estupideces que no llegan a nada.

Hasta ahora no he querido tocar el mundo de las damas y es que cuando una mujer se enamora eso se debe sentir como cuando el Mars Pathfinder llegó a Marte, territorio totalmente inexplorado; ellas tan seguras pero tan frágiles a la vez cosa que es totalmente entendible porque después de todo somos seres humanos; pero sí hay algo que debo reconocer del sexo femenino es que cuando se enamora lo hace con una pasión y un encantamiento que embruja a cualquiera, son listas como un lince planeando sus próximos movimientos en la relación que llevan y por más que nos cueste admitirlo siempre llevan un paso de ventaja, dispuestas a darlo todo pero a la vez dispuestas a quitar mucho si nos portamos como los propios idiotas con ellas. La mujer es algo grandioso, ya sea por su don natural de dar vida o por que nos vuelven locos con su exquisita existencia debemos amarlas como se lo merecen, porque sin ellas ni siquiera estaríamos aquí. Ellas al igual que nosotros serán fastidiosas, tendrán sus exigencias y más de una vez nos darán razones para mandarlo todo al carajo, pero quédate tranquilo sí lo que no funciona no tiene arreglo entonces se el mejor hombre y corta todo por lo sano pero recuerda hazlo con estilo y delicadeza, debido a que la elegancia distingue a un caballero pero la patanería y la ordinariez distingue es a un idiota. Muchas cosas en está vida no se solucionan con palabras y consejos, y sí lo que está escrito aquí no te ayuda por lo menos ten la decencia de ser una buena persona.

El amor es algo que no tiene definición acuérdate de eso, pero queda de ti hacerte una relación llena de alegrías o de fracasos porque sí no pones un poquito de tu parte entonces no te va a querer ni tu perro, además no todo se da en la primera vez, tu vida es larga y ella te sabrá decir cuando tienes lo indicado justo al lado tuyo, eso sí debes aprender a leer las señales y por sobre todo reconocer los pequeños detalles.
Jefferson.

No hay comentarios.: