ENTREVISTA
Casi un mes sin mostrarme por estos predios. Las teclas de mi computador comenzaban a extrañarme, y entre sueños me llamaban desde la sala del apartamento: ¡coño siéntate y escribe en el blog! Entonces aquí estamos para tocar un tema que ha afilado algunas espinitas estos últimos días: la entrevista. Sí, la entrevista, esa acción necesaria que debemos tener en cuenta para conocer, medianamente, los puntos de vista de otra persona. Todo esto podrá sonar muy técnico, y no los voy a empapar con teoría de periodismo; de cómo se hace y que debemos tener en cuenta dependiendo del personaje. Quiero hablarles de la dinámica de una entrevista. Cuando esa chispa con el entrevistado nos hace acorralarlo, sacar el jugo a la conversa y, a pesar de todo, terminar como amigos.
Para mis colegas, más experimentados en esta materia, esto debe ser un paseo por el parque. Si bien uno se entrena para estas situaciones, porque es nuestro trabajo, ser un buen entrevistador es un arte. Saber que unas cuantas interrogantes, una palabra bien dicha y un gesto en el rostro, nos puede dar material para escribir muchas cuartillas; es algo muy interesante. Por eso todos están invitados para que aporten ideas y experiencias al tema. Porque entrevistar no se queda dentro del campo periodístico. Diariamente miles de personas lo hacen por un trabajo, un reportaje, una salida entre amigos, y hasta en una cita entre dos persona que se atraen. La entrevista irrumpe como un ciclón dentro de nuestro abanico de herramientas para obtener respuestas a nuestras incógnitas. Personalmente, más allá de las referencias acerca de mi carrera que pueda tener, pienso que mi mamá es mi mejor entrevistadora. ¿Por qué? Porque me conoce, y allí está una de las primeras claves de este negocio.
No tenemos que hacer un Doctorado sobre el personaje que estamos a punto de caerle a peña. Pero sí hay que hacer la tarea, un trabajo previo antes de abalanzarnos como zamuros sobre la carroña. El conocimiento previo nos dará una buena palanca de empuje para tomar el control de la entrevista, así evitaremos caer en un debate y que sea una sola persona el guía de la conversa. De lo contrario, encontraremos respuestas vagas y que no van al punto. A esto se le une la cortesía; creo que algunas veces he mencionado por aquí que uno en la vida tiene que ser como James Bond: preparado para las patadas, los tiros y las persecuciones en alta velocidad, pero con el smoking bien limpiecito y sin arrugas. Para ser incisivo y al punto no es necesario el insulto, para obtener resultados no es necesario irse por la tajante; una buena pregunta genera una buena respuesta, de lo contrario la interrogante nunca estuvo bien formulada. Y que conste, eso no lo digo yo, lo dice Álex Grijelmo, uno de los duros del periodismo en España. Es por eso que hay que endulzar la pastilla y cuando estemos a punto de diabetes, lanzar el lomito. Para los colegas, acuérdense que un periodista es alguien con licencia para preguntar incomodidades.
Ahora si no estamos involucrados con el Medio, hay elementos que nos señalan el camino de una buena sesión de preguntas. Primero analizar el ambiente, ver si hay terceros que conocen al objetivo y obtener información, observar vestimenta e indumentaria, activar las parabólicas para ampliar el compás de posibles preguntas y por sobre todo, confiar en tus propia biblioteca de saberes. Para que no te caigan a charlas. Vieron que eso de la entrevista es divertido.
Larry King y el: ¿qué es mejor, pedir perdón o pedir permiso?
Confieso que no vi por completo el Miss Venezuela, en esos momentos estaba entretenido con capítulos grabados de Mister Maker (tratando de que mi hermano cayera en los brazos de Morfeo) y escuchaba como mi familia en la sala gritaba al unísono: ¡muchacha pa’ bruta! Al día siguiente me entero del episodio con la señorita que representaba al Dtto. Capital. Rápido me conecte a Youtube y observe el video de la ronda de preguntas. Dos cosas puedo concluir de este episodio: uno, que es mejor quedarse callado cuando no se tiene nada bueno que decir, y dos, que fielmente creo que las preguntas en esta sección del concurso van con el propósito de hacer fallar a sus participantes.
Analicemos un poco esto, sí la nueva Miss Venezuela salió el pasado viernes en una entrevista (vieron que es entretenido) indicando que: “no se debe criticar a las muchachas, cuando después de mucho cansancio, trajinar en tacones, maquilladas y frente a 11 mil personas hay que pararse frente a un jurado para responder preguntas”. Totalmente de acuerdo “mi reina”, es inhumana esta sección. Cómo se puede pretender que después de meses de trabajar con maestros de oratoria, viendo videos de las preguntas anteriores y de trabajar bajo presión no se pueda contestar una estupidez. Si no estás lista para la presión, para qué coño te metes a un concurso de belleza. Más aún con lo hijo e` puta que es este país, y que le produce un morbo terrible ver como las misses se equivocan. Es con este último comentario que justifico mi idea inicial, las preguntas se hacen a propósito, para verlas fallar, para ver esos numeritos de rating subir. Ya me imagino a los productores del programa en la previa: vamos a ver quien la caga hoy; y ¡ZASSSS! ahora la Radio Rochela y el Chigüire Bipolar tienen bastante material.
Ahora con lo de Larry King, y sus entrevistas al “que no se puede nombrar” (AKA Hugo Chávez) y al presidente de Irán, me queda decir una cosa: no hay perdida, es un excelente ejemplo de como se hace una entrevista. Mucho de ustedes no coincidirán conmigo, quizás es cierto que Larry se embobo un poco con Chávez y fue blandengue con el iraní, pero algo no se puede negar, ese señor si que sabe preguntar.
Jefferson.
P.D para terminar les recomiendo los espacios web de dos colegas: primero http://www.fyrdowpedia.tumblr.com/ y http://www.didasonu.tumblr.com/ con propuestas interesantes y de contenido volátil. ¡Salud!
Para mis colegas, más experimentados en esta materia, esto debe ser un paseo por el parque. Si bien uno se entrena para estas situaciones, porque es nuestro trabajo, ser un buen entrevistador es un arte. Saber que unas cuantas interrogantes, una palabra bien dicha y un gesto en el rostro, nos puede dar material para escribir muchas cuartillas; es algo muy interesante. Por eso todos están invitados para que aporten ideas y experiencias al tema. Porque entrevistar no se queda dentro del campo periodístico. Diariamente miles de personas lo hacen por un trabajo, un reportaje, una salida entre amigos, y hasta en una cita entre dos persona que se atraen. La entrevista irrumpe como un ciclón dentro de nuestro abanico de herramientas para obtener respuestas a nuestras incógnitas. Personalmente, más allá de las referencias acerca de mi carrera que pueda tener, pienso que mi mamá es mi mejor entrevistadora. ¿Por qué? Porque me conoce, y allí está una de las primeras claves de este negocio.
No tenemos que hacer un Doctorado sobre el personaje que estamos a punto de caerle a peña. Pero sí hay que hacer la tarea, un trabajo previo antes de abalanzarnos como zamuros sobre la carroña. El conocimiento previo nos dará una buena palanca de empuje para tomar el control de la entrevista, así evitaremos caer en un debate y que sea una sola persona el guía de la conversa. De lo contrario, encontraremos respuestas vagas y que no van al punto. A esto se le une la cortesía; creo que algunas veces he mencionado por aquí que uno en la vida tiene que ser como James Bond: preparado para las patadas, los tiros y las persecuciones en alta velocidad, pero con el smoking bien limpiecito y sin arrugas. Para ser incisivo y al punto no es necesario el insulto, para obtener resultados no es necesario irse por la tajante; una buena pregunta genera una buena respuesta, de lo contrario la interrogante nunca estuvo bien formulada. Y que conste, eso no lo digo yo, lo dice Álex Grijelmo, uno de los duros del periodismo en España. Es por eso que hay que endulzar la pastilla y cuando estemos a punto de diabetes, lanzar el lomito. Para los colegas, acuérdense que un periodista es alguien con licencia para preguntar incomodidades.
Ahora si no estamos involucrados con el Medio, hay elementos que nos señalan el camino de una buena sesión de preguntas. Primero analizar el ambiente, ver si hay terceros que conocen al objetivo y obtener información, observar vestimenta e indumentaria, activar las parabólicas para ampliar el compás de posibles preguntas y por sobre todo, confiar en tus propia biblioteca de saberes. Para que no te caigan a charlas. Vieron que eso de la entrevista es divertido.
Larry King y el: ¿qué es mejor, pedir perdón o pedir permiso?
Confieso que no vi por completo el Miss Venezuela, en esos momentos estaba entretenido con capítulos grabados de Mister Maker (tratando de que mi hermano cayera en los brazos de Morfeo) y escuchaba como mi familia en la sala gritaba al unísono: ¡muchacha pa’ bruta! Al día siguiente me entero del episodio con la señorita que representaba al Dtto. Capital. Rápido me conecte a Youtube y observe el video de la ronda de preguntas. Dos cosas puedo concluir de este episodio: uno, que es mejor quedarse callado cuando no se tiene nada bueno que decir, y dos, que fielmente creo que las preguntas en esta sección del concurso van con el propósito de hacer fallar a sus participantes.
Analicemos un poco esto, sí la nueva Miss Venezuela salió el pasado viernes en una entrevista (vieron que es entretenido) indicando que: “no se debe criticar a las muchachas, cuando después de mucho cansancio, trajinar en tacones, maquilladas y frente a 11 mil personas hay que pararse frente a un jurado para responder preguntas”. Totalmente de acuerdo “mi reina”, es inhumana esta sección. Cómo se puede pretender que después de meses de trabajar con maestros de oratoria, viendo videos de las preguntas anteriores y de trabajar bajo presión no se pueda contestar una estupidez. Si no estás lista para la presión, para qué coño te metes a un concurso de belleza. Más aún con lo hijo e` puta que es este país, y que le produce un morbo terrible ver como las misses se equivocan. Es con este último comentario que justifico mi idea inicial, las preguntas se hacen a propósito, para verlas fallar, para ver esos numeritos de rating subir. Ya me imagino a los productores del programa en la previa: vamos a ver quien la caga hoy; y ¡ZASSSS! ahora la Radio Rochela y el Chigüire Bipolar tienen bastante material.
Ahora con lo de Larry King, y sus entrevistas al “que no se puede nombrar” (AKA Hugo Chávez) y al presidente de Irán, me queda decir una cosa: no hay perdida, es un excelente ejemplo de como se hace una entrevista. Mucho de ustedes no coincidirán conmigo, quizás es cierto que Larry se embobo un poco con Chávez y fue blandengue con el iraní, pero algo no se puede negar, ese señor si que sabe preguntar.
Jefferson.
P.D para terminar les recomiendo los espacios web de dos colegas: primero http://www.fyrdowpedia.tumblr.com/ y http://www.didasonu.tumblr.com/ con propuestas interesantes y de contenido volátil. ¡Salud!